En la nota de ayer hable del alza del petróleo que esta la mezcla mexicana en 110 dólares y aumentando, pero también escribí que la pobreza en México sigue hacia arriba. Esto lo puedo respaldar con un artículo que sale el día de hoy en el periódico El Universal de nuestro país donde confirman mis escritos al decir que la canasta básica de alimento en México a aumentado un 50% si leiste bien CINCUENTA POR CIENTO, en un país donde el anterior trimeste dejo un superavit de más de 11 mil millones de dólares algo asi como 115 mil millones de pesos mexicanos, lo suficiente para construir más tres refinerías y dejar de estar importando el 40% de gasolina y el poder injectar dinero al campo para que produzcan el alimento los granos que necesitamos los mexicanos y hacer muchas cosas más. Pero la realidad es otra y lo que quiere el gobierno ilegítimo de Calderón es seguir fregandonos, por no decir otra cosa (chin###%%%) este gerentillo sigue como buen empleado de los vende patrías (los potentados) las ordenes no importa que la gente de México nos alimentemos como podamos si es que se llama alimentar a lo que comemos, ya que no tenemos una alimentación balanceada, porque la mayoría de nosotros incluimos el tan nefasto refresco en nuestra dieta.
Ahora resulta que el gobierno de los Estados Unidos nos "apoyan" con una misera cantidad de dinero algo así como 400 millones de dólares para el plan Mérida (ASPAN) nada más que disfrazado el nombre, y digo que es una misería de dinero porque NOSOTROS TENEMOS SUFICIENTE DINERO, para ser autosuficientes, en donde esta pues sería bueno preguntarle a gobierno usurpador: ¿en donde lo tiene?, ¿y por que no nos apoya?, a este señor (calderón con minusculas) no el importa el sufrimiento que podamos tener, salio más mentiroso y ratero que fox (con minusculas). Bueno a continuación te pongo la nota completa.
El UniversalViernes 23 de mayo de 2008
Los incrementos de hasta 50% en los precios de alimentos, principalmente de la canasta básica, propiciaron que en los mercados públicos, donde se abastece el grueso de la población, los clientes huyan al escuchar éstos. Los más angustiados dicen ya no saber “qué hacer para estirar el gasto”. Testimonios recogidos “al pie del puesto” en 10 estados del país —sur, centro y norte— coinciden en que para alimentar a la familia con lo poco que se lleva en el monedero, hasta la calidad es lo de menos. El arroz, aceite y pastas se cotizan cada día más alto, lo que ha llevado a desplazarlos de la mesa diaria. De la carne, ni se diga. Y hasta el pollo empezó a subir
Resienten una escalada bárbara
MÉRIDA, Yuc.— Para Elvira Cauich de Bojórquez, empleada burócrata, comprar los productos con los que elabora la comida es un martirio: “Con lo poco que cobramos tenemos que ver que nos alcance. Dos veces a la semana comemos carne de res, verduras y sopas”.
Aun con dos sueldos en casa, “apenas nos alcanza”, dice y advierte que desde enero percibió una escalada de precios “¡bárbara!”, pues el arroz, frijol y aceite, así como la carne de pollo y res aumentaron “creo que 300%”.
Doña María Yolanda Caballero Queb, de compras en el mercado local Lucas de Gálvez, asegura que su esposo —Luis Arcángel Domínguez Domínguez, obrero— gana 500 pesos semanales y con los descuentos le queda 420 pesos. Con tres hijos, “apenas podemos irla pasando”.
Ante esta situación, los comerciantes resienten bajas en las ventas de entre 40 y 45%, según Luis Puch Cherris, comerciante de este mercado: “No percibimos escasez de granos, pues la gente apenas si tiene para comprar; las ventas están bajando”.
El mercado Lucas de Gálvez es el sitio a donde por lo general van las familias de recursos modestos a adquirir frutas, verduras y carnes, entre otros. El menú yucateco ya no puede disfrutarse diario. Para María Yolanda Caballero, el clásico puchero de gallina se come una vez al mes. Lleva muchas verduras, fideos, carne de pollo y res, más los condimentos. Una comida no baja de 180 a 250 pesos, explica.
Los incrementos de hasta 50% en los precios de alimentos, principalmente de la canasta básica, propiciaron que en los mercados públicos, donde se abastece el grueso de la población, los clientes huyan al escuchar éstos. Los más angustiados dicen ya no saber “qué hacer para estirar el gasto”. Testimonios recogidos “al pie del puesto” en 10 estados del país —sur, centro y norte— coinciden en que para alimentar a la familia con lo poco que se lleva en el monedero, hasta la calidad es lo de menos. El arroz, aceite y pastas se cotizan cada día más alto, lo que ha llevado a desplazarlos de la mesa diaria. De la carne, ni se diga. Y hasta el pollo empezó a subir
Resienten una escalada bárbara
MÉRIDA, Yuc.— Para Elvira Cauich de Bojórquez, empleada burócrata, comprar los productos con los que elabora la comida es un martirio: “Con lo poco que cobramos tenemos que ver que nos alcance. Dos veces a la semana comemos carne de res, verduras y sopas”.
Aun con dos sueldos en casa, “apenas nos alcanza”, dice y advierte que desde enero percibió una escalada de precios “¡bárbara!”, pues el arroz, frijol y aceite, así como la carne de pollo y res aumentaron “creo que 300%”.
Doña María Yolanda Caballero Queb, de compras en el mercado local Lucas de Gálvez, asegura que su esposo —Luis Arcángel Domínguez Domínguez, obrero— gana 500 pesos semanales y con los descuentos le queda 420 pesos. Con tres hijos, “apenas podemos irla pasando”.
Ante esta situación, los comerciantes resienten bajas en las ventas de entre 40 y 45%, según Luis Puch Cherris, comerciante de este mercado: “No percibimos escasez de granos, pues la gente apenas si tiene para comprar; las ventas están bajando”.
El mercado Lucas de Gálvez es el sitio a donde por lo general van las familias de recursos modestos a adquirir frutas, verduras y carnes, entre otros. El menú yucateco ya no puede disfrutarse diario. Para María Yolanda Caballero, el clásico puchero de gallina se come una vez al mes. Lleva muchas verduras, fideos, carne de pollo y res, más los condimentos. Una comida no baja de 180 a 250 pesos, explica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario